De manera paralela y de forma virtual este viernes 6 de septiembre de 2024, se realizaron dos audiencias de apelaciones donde la Fiscalía Primera Superior Especializada en Delitos Relacionadas con Drogas logró que el Tribunal confirmara la detención provisional para 18 personas imputadas en la operación “Jericó”. Adicional se revocó, a solicitud de la Fiscalía, la medida de notificación periódica y retención domiciliaria para otras dos personas y se ordenó la detención provisional y se mantienen otras dos medidas distintas a la detención provisional.

En la Sala 1, el fiscal Joseph Díaz presentó cada uno de los elementos que vinculaban al delito de blanqueo de capitales a un hombre de 31 años de edad que fungía como gerente de una empresa ubicada en Bethania, lo que motivó que de manera unánime el Tribunal conformado por las magistradas, Asunción Alonso, Leira Terán y Miriam Jaén, ordenara la detención provisional al considerar que la Fiscalía acreditó debidamente el delito imputado, mediante los informes de seguimiento y vigilancia, las interceptaciones telefónicas, donde se escuchaba las coordinaciones para la entrega de la suma de B/. 89.985.00 en efectivo a Jonathan Parra, que resultó con condena por el delito de blanqueo de capitales.

También se dijo que posterior a este hecho se escuchó al imputado, que hoy vestía suéter amarillo y seguía la audiencia de manera virtual, dar instrucciones de cómo se debía distribuir el dinero en pequeñas cantidades en los bancos, entre otros; manifestaciones que según el Tribunal comprometen su vinculación al hecho investigado.

En tanto en la sala 3, donde atendía la fiscal Janell Acuña, las magistradas Greta Marchosky, Giles Pittí y Yanelka Quijano decidieron confirmar la medida de detención provisional para 17 personas que buscaban cambiar la medida impuesta en primera instancia por el juez de garantías, Mike Zúñiga, el 22 de agosto de 2024.

En la audiencia las Magistradas valoraron los riesgos procesales de peligro de fuga, desatención al proceso, afectación a los medios de pruebas, el peligro que representan para la comunidad, lo que motivó a decidir la detención provisional al tomar en cuenta que en la operación Jericó existen vinculaciones directas en los delitos imputados, que no se trata de un “casito más», sino de hechos graves, que existen participación activa y por la posible reiteración de los hechos.