En audiencia de solicitudes múltiples, la Sección Primera de Delitos contra el Patrimonio Económico de la Fiscalía Metropolitana ante un Juzgado de Garantías, logró la condena de 40 meses de prisión a Jorge North Leslie, imputado por el delito hurto con fractura, lo cual será cumplido en un centro penitenciario, toda vez que mantiene otra causa pendiente, por el mismo delito en perjuicio de un restaurante de comida rápida.

Luego de presentada las solicitudes por la fiscal Fátima Hernández, ante la juez de garantías, Marisol Ortiz, se legalizó la aprehensión, se dio por presentada la formulación de imputación y se accedió a la condena, demostrados los elementos de convicción que acreditaron el hecho investigado y la individualización del imputado.

La presente investigación inició mediante denuncia interpuesta por la víctima quien manifestó que para el 3 de enero de 2023, recibe llamada de teléfono de su esposa y le manifiesta que le cortaron dos suministros de las líneas de perímetros de seguridad de la clínica ubicada en Vía Brasil, por lo cual llamaron a la policía y al llegar procedieron a abrir el local e ingresar para verificar la seguridad del lugar, el cual después de un minucioso recorrido se percata que en uno de los baños había un hueco en el techo, adicional que los archivadores del laboratorio que estaban pegados al baño, estaban movidos y revueltos.

En la oficina de administración forzaron un archivador y se llevaron una tarjeta física de garantía y certificado de un reloj bañado en oro y piezas de repuesto para el reloj bañadas en oro blanco y amarillo, por un valor de 800 balboas, una mochila, un teclado de IPad Pro de 11″, un perfume valorado en doscientos veinte balboas, entre otros bienes de valor.

Mientras estaban revisando en el pasillo, entre la entrada del baño donde entró el sujeto y del laboratorio escucharon un ruido en el techo y una de las unidades policiales entró al baño con una escalera y se percató que había una persona en el techo del edificio, por lo cual procede a subirse por la misma parte donde rompió el sujeto y con apoyo de otro oficial dan con la aprehensión del sentenciado, quien mantenía en su poder las pertenencias antes señaladas.